Cristina Mariscal, una madre española habitante de Sevilla, hacía dos meses que le impedía al padre de sus hijos ver a los menores. ¿El motivo? Ella pretendía evitar que el hombre llevara a los niños de 12 y 14 a que les apliquen la vacuna contra el Covid. Pero finalmente, y tras una decisión judicial que se le concedió al papá, la mujer tuvo que entregar a los niños a un juzgado.
Según consignó el diario local ABC de Sevilla, todo comenzó cuando Mariscal dejó de llevar a los menores al colegio el pasado 4 de noviembre. Desde entonces, no permitió que el padre viera a los preadolescentes ni que se los llevara bajo el régimen de custodia compartida para evitar que los vacunara contra el Covid.
Fue entonces que el padre de los menores, a través de su abogado, inició una acción judicial por la sustracción de los menores y se le concedió de manera extraordinaria la custodia de los niños. El 16 de diciembre, Mariscal recibió la notificación de la denuncia en su contra y la mujer decidió desaparecer junto a sus hijos.
Hoy, el abogado del padre de los menores indicó que la Guardia Civil les informó que la mujer se dirigía en este momento al Juzgado de Guardia de Sevilla para, finalmente, entregar a los niños.
No se trataba de la primera vez que la madre y el padre tenían discrepancias sobre la vacunación de sus hijos, tanto de la del Covid como por otras enfermedades, según la denuncia del papá de los menores. El abogado del hombre, Javier Touceda, dijo que Mariscal “es una mujer antivacunas” y que incluso no le quiere aplicar a los chicos protector solar en verano “porque es cancerígeno”.
