La derrota en el clásico con Racing no fue más que la gota que rebalsó el vaso. La floja campaña deportiva se suma a las promesas incumplidas por la dirigencia y la sensación de falta de apoyo para el entrenador.
Domínguez se presentó en el predio de Villa Domínico este martes, donde estaba presente el Secretario General, Héctor Maldonado, y el mánager Rolfi Montenegro, quien tenía intenciones de convencer al DT para continuar, pero la decisión estaba tomada.
Según informó Nicolás Brusco en SportsCenter AM, en la dirigencia había opiniones divididas sobre la continuidad del técnico, ni había demasiado interés por pedirle que se quedara, aunque tampoco nadie le pidió lo contrario.
Lo cierto es que Domínguez aceptó el cargo a principios de este año sabiendo que la situación económica del club rojo era muy mala y que en el primer mercado de pases no iba a poder contar con refuerzos y que, incluso, iba a perder a varios futbolistas. Pero para el segundo mercado la promesa era otra y el caso de Rodrigo Aliendro, quien tenía todo acordado con Independiente, pero finalmente se fue a River fue un punto de quiebre.
El técnico no sentía el apoyo dirigencial en el día a día, de hecho, no hubo presencias importantes el domingo en cancha de Racing.
Tras apenas siete meses al frente del equipo, Domínguez no pudo levantar deportivamente a Independiente, quedó eliminado en primera fase de la CONMEBOL Sudamericana, y actualmente el Rojo marcha 22° en el Torneo de la Liga, con dos triunfos, cuatro derrotas y un empate.
