Cristina, madre de Gabriel García Gurrea, dialogó con el equipo periodístico de RADIO UNIVERSAL y brindó precisiones del caso. Cabe destacar que Gurrea está desaparecido desde mayo de este año.
«Las cosas no se hicieron desde un principio, se dejó pasar mucho tiempo hasta que empezó la investigación. Son casi seis meses que desapareció mi hijo y todavía no tenemos ninguna novedad«, inició contando Cristina.
Y agregó: «Nosotros mucha información no tenemos, ellos (Fiscalía) nos dicen que mucha información no nos pueden pasar. Cuando hacen rastrillajes nos enteramos por la prensa. Según ellos, no nos dicen nada para que no se filtre información, aunque la información se filtra y no es por nuestro lado».
En ese sentido, reflexionó que «ya pasó tanto tiempo que uno piensa lo peor, todo apunta al entorno de su pareja. Se dijeron muchas mentiras, como que cuando Gabi se fue se llevó un montón de plata y cosas así que después se descartaron».
Consultada por Pamela Antúnez, última pareja de Gurrea y sospechosa en la causa, dijo: «Yo digo ella, no la puedo nombrar porque me hizo una restricción y una denuncia penal. ¿A usted le parece que yo, una persona de 70 años puedo hacerle algo a ella? Ella nos hizo la denuncia a mi hijo, a mí y a mi nuera porque fuimos con un grupo a manifestarnos en frente de su casa».
En cuanto a su relación con Antúnez, aseguró: «Nosotros teníamos un muy buen trato con ella, ella venía siempre. El día 18 estuvo en casa tomando mates, el 19 que desaparece Gabriel no me habló ni me dijo nada».
Acerca de la relación entre Gabriel García Gurrea y Pamela Antúnez, explicó que no era la primera vez que se peleaban de esta manera, aunque «cada vez que tenía problemas él se venía a casa».
«La vez que se fue de su casa se vino para mi casa y estuvo casi un mes acá. Mi hijo siempre dijo que se quería ir a España porque tiene a los otros dos hermanos allá», contó Cristina.
«Cuando se peleó en diciembre de 2019, ella le rompió el pasaporte para que no se vaya. Después ella lo volvió a buscar y él volvió a su casa», añadió.
Siguiendo con el relato, sostuvo: «Yo fui a hablar con ella (Antúnez), nunca más me atendió ni el teléfono, se borró completamente. Con el tiempo me fui enterando de las cosas».
Por último, señaló que «la investigación sigue, están las muestras de sangre en La Plata y también algunos celulares, pero ya pasaron casi dos meses».
